miércoles, 23 de junio de 2004

San Pedro de Santa Bárbara

De mis 20 años de vida, tengo aproximadamente unos 14 años de vivir en este pueblo. Mi mamá creció en este pueblo y mi papá como desde los 16.

Que decir: "pueblo pequeño, infierno grande". Un pueblito "rural" donde todos se conocen, lleno de señoras chismosas, vagos robacarros, vagos que pasan andando todo el día en moto, mejengueros, etc.

Si bien, mi familia por parte de mi mamá, es super conocida en este pueblo, para la mayoría yo soy un completo desconcido. Y lo prefiero así.

Hoy mientras pasaba por el downtown de mi pueblo, noté que ya estaban colocando las "ruedas" de la Ciudad Mágica. Como es constumbre, cada año para el día de San Pedro, todos se visten de fiesta, las cuales son muy concurridas, principalmente (según creo) porque inician cuando los escolares y colegiales tienen vacaciones de 15 días. Mucha gente de los alrededores vienen a darse una vuelta aunque sea un día de los 15 que duran aquí.

Los pueblerinos, pues siguen muchas tradiciones:

- Dos veces al año compran ropa nueva, una para navidad y para las "fiestas de San Pedro", las cuales se convierten en pasarela.

- Las mujeres adolescentes empiezan a "darle pelota" a los mágicos con el único fin de obtener tiquetes de manera ¿gratuita?.

- Por último, el famoso partido de los gordos y los flacos. El cual ha sido televisado hasta por Tevé Mejenga, o narrado por Radio Puntarenas... La pequeña plaza, se inunda ése día de gente que viene con el único afán de pasarla bien.


Personalmente, estas fiestas, sirven únicamente para salir un rato a encontrarse con personas que tengo tiempo de no ver, viejos compañeros, viejos amigos. Hay años que ni siquiera me doy la vuelta, pero recuerdo que cuando tenía trece no falté ningún día... Jeje... Como cambiamos, no?

Las consecuencias de Las fiestas de San Pedro son:

- Los bolsillos de los pueblerinos vacíos.
- Los bolsillos de la parroquia y los dueños de la ciudad mágica, llenos.
- Las zonas verdes de alrededor de la iglesia quedan cafés (léase barro).
- Tener que dejar en agua las tennis para ver si se les sale el barro.


Nada más...