lunes, 2 de agosto de 2004

Estaba ayer domingo sentado frente a al compu en la noche. Mis ojos cansados, un poco de sueño por no haber dormido el día anterior, y todos mis pensamientos recorrían matrices de datos.

De pronto entra alguien y pregunta por mí. Era mi abuelita la cual me dice: "ay mi chiquito, porque no sales a pasear los domingos". Yo, como si estuviera ejecutando un módulo de salida común, le digo: "diay ma, es que no tengo tiempo". Y ella me responde: "Bueno, al que no le gusta..."

Esa es la imagen que tiene ella de mí: alguien al que no le gusta salir. Después de estar acostumbrada que los muchachillos (como lo fueron mi papá y mis tíos) les guste ir a salir a pasear los fines con muchachas y cosas por el estilo, seguro le parezco extraño.

Más tarde salgo a comprar comida y me quedo mirando el parque de Santa Bárbara: jóvenes y no tan jóvenes, todos bien mudados, muchos en plan de cortejo, otros sólo dando vueltas como trompos por todo el parque a ver ¿qué?. Otros que pasan a altas velocidades en moto, con sus damas en la parte de atrás. Otros en Hyunday con sus princesas al lado.

Muchas veces a gente se va al extremo: No sales a pasear, o no te vas de fiesta a bares o bailes los viernes en la noche, entonces no te gusta "salir"

Todo lo tienden a ver blanco o negro. Debemos siempre tratar de ver grises. De entender.
Yo sé que no es que no salgo porque no me guste, es porque a veces no tengo tiempo, más ahora que estoy a final de trimestre. Pero si voy al cine, o donde amigos, veo películas, leo libros (o me meto horas a una librería para buscar uno), de vez en cuando a conciertos, y ocacionalmente al teatro (la verdad no tanto porque mi compañera de tablas siempre está ocupada). Pero, realizando todas estas salidas y actividades, soy feliz. Es mi tono de gris.

Se que todavía no soy como quiero ser con respecto a esas actividades, ya que me gustaría ir a más conciertos (pero no hay plata) o viajar más (no hay plata ni tiempo), pero espero que eso se mejore conforme me vaya integrando a la vida laboral (aunque me temo que tendré plata pero igual me faltará tiempo).